Nuevos colores en el Parlamento andaluz

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Las elecciones andaluzas han sido el espejo en el que mirarse todas las formaciones políticas que aspiran a las próximas municipales, autonómicas y nacionales. Los resultados que se han ido conociendo poco a poco a lo largo de la noche han servido para hacer quinielas futuras. En esas apuestas, dos nuevas formaciones toman fuerza en la comunidad andaluza: Podemos (que ya venían de reventar las urnas en Europa) y Ciudadanos. Por contra, varios partidos han sido los más perjudicados en estas elecciones debido a la aparición de estos nuevos partidos. Así, Izquierda Unida (IU) pierde la mitad de sus escaños, el Partido Popular pierde unos veinte y UPyD vuelve a quedarse fuera de la Cámara. En cuanto al PSOE, mantiene sus números de las anteriores elecciones, un hecho que no le da la mayoría del Parlamento y tendrá que buscar apoyos de gobierno a pesar de ser la fuerza más votada en Andalucía. 

Hasta ahí los datos. 

Los andaluces y andaluzas han ejercido su derecho al voto, libremente, de manera individual, y espero que de forma coherente. Los resultados están ahí, las papeletas han sido la voz de la gente de mi tierra, esa misma gente (y otras de fuera) que aún votando lo que han querido, no respetan lo que han votado otros. Considero una mala manía esa de criticar lo que no nos gusta de manera insultante. Llamar "catetos", "tontos" o "borregos" a quienes han votado al PSOE o al PP no es la manera de actuar en la llamada "fiesta de la democracia". Los resultados pueden gustar más o menos, pero ni son unos tontos los que votan a los partidos mayoritarios ni unos perroflautas los que han votado a Podemos. Es importante respetar la opinión de los ciudadanos que hoy han acudido a votar. Nos guste más, o menos. 

El arco ideológico en el Parlamento Andaluz añade colores nuevos a su Cámara, ojalá ese nuevo escenario traiga buenas leyes y medidas para Andalucía y sus ciudadanos. Los pactos que pudieran producirse se harán con mucha cautela ya que todos los partidos están mirando de reojo a las elecciones municipales y lo que dichos acuerdos puedan provocar en sus votantes. Nos quedan por delante unos meses muy interesantes en Andalucía. Aunque esperemos que esas maniobras de pacto/no pacto, no traigan un inicio de legislatura perjudicial para lo que de verdad importa: los andaluces y andaluzas. 

Hace tres años, viví las elecciones andaluzas desde Sevilla, en el hotel que fue aquel día sede del PSOE, ejerciendo como periodista, escribiendo crónicas sobre la noche electoral para un periódico digital. Hoy lo vivo desde el sofá de mi casa, envidiando (sanamente) a todos los compañeros que están contando los hechos desde allí. Enhorabuena a todos los compañeros y compañeras de profesión que hoy han contado con rigor estas elecciones. Y enhorabuena a todos los andaluces y andaluzas que hoy han dejado atrás la apatía y han acudido a las urnas a ejercer su derecho al voto. Todos y cada uno de ellos respetables. Siempre. Ahora a seguir trabajando por el bienestar de los andaluces y andaluzas.