Vivo en una ciudad en la que ya hasta hacer campañas inofensivas son consideradas peligrosas, y me explico.
La Policía Local de Jerez ha desmantelado esta mañana el acto por el Día Mundial del Agua (suspendido hace un par de semanas por la lluvia) de la Plaza del Arenal, y ha obligado a sus organizadores a "esconderse" en el edificio de los sindicatos. La policía mostrando una vez más su "cercanía" con el pueblo ha tomado nota de los DNIs de los participantes y los ha echado de allí aludiendo que "no tenían autorización". Esto plantea una cuestión a debate: Si estás más de diez minutos en la calle sin moverte, ¿se considera ocupación de la vía pública?
La campaña - inofensiva y de concienciación -, consistía en implantar a lo largo de la calle paneles educativos, reivindicativos y de denuncia, además de exponer 100 litros de agua (colocados en garrafas) y otra aparte, para mostrar la relación entre agua salada y dulce en el planeta, ademas de recoger firmas y hablar con la ciudadanía.
Este simple acto, que no tenía ningún aliciente político y que había sido organizado por la Plataforma del Agua de Jerez, ha sido relegado a la entrada del edificio de los sindicatos situados en la misma Plaza del Arenal por "ocupar la vía pública sin autorización". ¿La policía actúa con el mismo rigor con las campañas de Cáritas, Médicos sin Fronteras, etc que cada semana ocupan la calle Larga? Creo que al igual que estos ejemplos no hacen ningún daño a la ciudadanía ni a la propia ciudad, la campaña del Agua tampoco era "nociva" para Jerez.
La duda ahora es, ¿la Policía Local ha actuado por su cuenta o siguiendo las órdenes del Gobierno Local de la ciudad en manos del Partido Popular y María José García-Pelayo?
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