Viendo estas cifras lo primero que se viene a la cabeza es esa promesa electoral de dar empleo bajo el lema "más empleo, menos impuestos". En aquel entonces, allá por 2011, el Partido Popular de Mariano Rajoy pedía "confianza" en ellos y que nos "sumáramos al cambio". Con ellos, España saldría de la crisis y acabaría con el paro elevado que - según ellos- las políticas de Zapatero (PSOE) habían creado.
Rajoy en un mitín electoral durante la campaña de 2011 |
Hasta ahora, que se sepa, han recortado derechos en Educación; impuesto el copago sanitario; anulado la Ley de Dependencia (no oficialmente pero sí a raíz de sus medidas más restrictivas); subido los impuestos, incluidos los de algunos servicios básicos como la higiene personal o los pañales de bebé; y siguen sin dar solución a los desahucios, algo que tiene en vela a miles de ciudadanos, porque lo menos que podría esperarse de un Gobierno es que protegiera a sus ciudadanos haciendo que si el banco les quita la casa, al menos no tengan que seguir pagándola.
Banco de alimentos
Otro asunto que este fin de semana me ha dejado preocupada ha sido la noticia de que el Banco de Alimentos ha rechazado la "ayuda" que los diputados socialistas iban a hacer a esta organización, destinando su salario del próximo 14N, día de la Huelga General. Se pueden hacer muchas críticas al respecto, no lo dudo. Que si es partidismo, que si se busca rédito político y mil historias más, pero lo que no puede negarse es que no está la cosa para andar rechazando ayuda venga de quien venga.
También es cierto que los diputados socialistas podrían ese día secundar la Huelga General y no acudir a sus puestos en todos los ámbitos de la política: Congreso, diputaciones, ayuntamientos,etc... y apoyar de esta manera a todos los ciudadanos... Pero supongo que eso es pedir mucho a los de arriba. Aún así y volviendo al Banco de Alimentos, sigo creyendo que rechazar la ayuda socialista por mucho que venga de ellos es un error. Los datos del paro son cada mes más escalofriantes, familias enteras se encuentran en situación de desempleo y cada vez más los comedores sociales se llenan de personas normales que han sufrido el yugo de la crisis. Cuando te dan un litro de leche y una barra de pan, no importa si viene del PSOE, del PP o de la Iglesia, lo importante es que lo tienes.
No hay que caer en la mal llamada "caridad" porque eso deja al ayudado en una posición de sumisión ante el que ofrece ayuda, pero tampoco hay que ponerse "especialitos" y descartar ayudas y buenas intenciones. Si seguimos así, discriminando y dividiendo, al final nos encontraremos todos en el mismo banco.
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